México

México… ¿emburbujado?

Transformación de Sociedades

Sobre las relaciones México – Estados Unidos y la migración en el continente americano

Quizá lo que acaba de suceder, en relación a la NO aplicación de aranceles a las exportaciones mexicanas a Estados Unidos, tenga otros efectos colaterales positivos para México.

El sistema capitalista, es claro que tiene sus propias debilidades, y que sus días están contados. Lo que siguen sin estar claro es … ¿Cuál será el nuevo modelo de gobierno nacional, regional y global?

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Si Consulto, No consulto, ¿consulto?

Transformación de Sociedades

El nuevo gobierno en México, asocia las consultas o encuestas casa por casa con el modelo de democracia participativa, e insiste que la primera consulta (relacionada con la ubicación del nuevo aeropuerto) que se realizará a finales de octubre (2018), será vinculante, sin embargo con la poca información que han compartido se habla de que en solo 528 municipios se instalará un promedio de 2 casillas por municipio.

En otro articulo reciente, se estimaba que votarán entre 100,000 y 500,000 personas, si tomamos como referencia las 500,000 personas (en un país de 130 millones de habitantes) y dividimos entre las 528 casillas durante 4 días, estando abiertas las casillas 8 horas diarias, resulta que deberan recibir en cada casilla a 30 personas por horas, o un voto cada dos minutos , pero tupidito, las 8 horas sin parar. Quiza por eso es el rango tan amplio entre 100,000 y 500,000 personas.

Una muestra de ese tamaño pudiera ser representativa del “deseo” de la totalidad del país siempre y cuando cumpliera con una doble aleatoriedad: primero elegir los 528 municipios de manera aleatoria y después elegir de la misma forma, a quienes deberan votar, eligiendo en promedio a 1000 personas al azar del padrón de electores en cada municipio, debiendo seleccionar al menos el doble en cada municipio ya que la tasa de ausentismo pudiera ser muy alta.

Y como el proceso NO sera organIzado, ni diseñado, ni ejecutado, ni supervisado, por el INE, por definición NO puede ser vinculatorio, que cabe aclarar que aun siendo organizado 100% por el INE, puede definirse como vinculatorio o no vinculatorio.

De manera que legalmente, si el presidente electo decide ejecutar a ojos cerrados el resultado de esta extraña consulta – encuesta, eso NO significa que sea legalmente vinculatoria, simplemente significará, que el presidente electo al no querer o poder tomar una decisión entre él y su equipo y expertos que han sido consultados, simplemente esta decidiendo que es una mejor decisión la que tomen esos 100 mil a 500 mil mexicanos, y finalmente será SU decisión y por ende seguirá siendo 100% SU responsabilidad.

Tampoco se ha comunicado si simplemente será una boleta con las diferentes opciones y que solo se pueda elegir UNA opción, o seran varias preguntas de opción mulitiple. Que si este fuera el caso sería muy valioso preguntar: edad, ocupación, grado escolar, nivel de conocimiento del asunto a votar, y finalmente que emita su voto.

De igual forma, no se comunicado con que % de votos se elegirá la opcion ganadora, ni cuál será el minimo de ciudadanos que se requiere que voten, para que sea estadísticamente valida la encuesta o si al no cumplir con este mínimo habrá una segunda vuelta. También es necesario saber cómo se eligiran a los funcionarios de casillas y la metodología para evitar que una persona vote varias veces.

Ahora bien, tampoco existe (que yo sepa) un reglamento, procedimiento o ley en dónde se explique cuales son los criterios para someter a votación los diversos temas responsabilidad del gobierno federal, que conste que no estoy en contra de una autentica democracia participativa, sino de que se realice de manera desorganizada, no bien diseñada y con baja participación y baja confiabilidad estadística.

Y ademas esta el asunto de los temas que SÍ serán consultados y cuales NO serán consultados, y vaya que es de suma importancia el entendere cómo vamos a transitar los siguientes 5 años y 10 meses, ya que, bien se puede aprovechar el ejercicio para de una vez aprovechar y someter a consulta otros temas, por ejemplo: el presupuesto de egresos, el nuevo nivel de salario mínimo para el 2019, el número y ubicación de las nuevas refinerías, si el ejercito sigue en las calles o se acuartela, las diferentes estrategias para combatir al “huachicoleo”, obvio el tren maya y las diferentes rutas alternativas, el monto de pensión para los ancianos y de paso también la edad a partir de la cual podrán recibir dicha pensión, el número de nuevos soldados, policias y marinos a contratar, los apoyos a los ninis y estudiantes, la propuesta de cancelación de la reforma educativa, si se aplicará o no la tecnología del ”Fracking”, así como el porcentaje de incremento de sueldo a quienes ganan menos de $ 20,000.00 mensuales, etc., etc.

¿Por qué en ciertas decisiones multimillonarias el ganso no se cansará hasta que sean una realidad?, y ¿por qué en otras decisiones el ganso no solo estará cansado, sino que ni siquiera sera convocado a participar sin cansancio?

 

O quizá estoy pidiendo mucho, y realmente se pondrán dos urnas por municipio y los ciudadanos que pasen por ahi y porten su tarjeta del INE pasaran a votar o veremos camiones de acarreados de los diversos partidos bajando por una puerta para ir a votar y de regreso subiendo por la otra puerta recibiendo su refrigerio para regresarlos a su remotas colonias o comunidades con la satisfacción del deber cumplido.

Después de todo, si 30 millones de mexicanos votaron por el presidente electo, casi un promedio de 1 millon de ciudadanos por estado, no debe ser muy dificil conseguir 500,000 en todo el país aproximadamente 1000 por municipio y “cumplir” con la consulta ofrecida en campaña y finalmente obtener el resultado esperado por el mismo presidente electo y su equipo.

Y mientras obtenemos las respuestas a muchas interrogantes aquí planteadas, podemos seguir dehojando la margarita.

 

 

Sobre el Pensador Sistémico.

Novarum Consultoría

Resumen: Para poder profundizar en el entendimiento, comprensión y operación del concepto de Pensamiento Sistémico, es preciso reconocer que para que exista un Sistema de Actividad Humana (S.A.H.) es inevitable que exista uno o mas personas que juegan el rol –explícito o implícito- de “diseñadores del sistema”. Dicho diseño será sin duda un reflejo o proyección de la forma de pensar de dichas personas. 
“Es la teoría la que determina lo que podemos observar”
Célebre observación de Einstein a Heinsenberg
Tomado de: Watzlawick, 1994, p.114
 
Introducción: Existen diversos tipos de sistemas, por ejemplo:

  1. Sistemas naturales o ecosistemas que existen en la naturaleza.
  2. Sistemas de actividades de actividad humana. (SAH)
  3. Sistemas inanimados, por ejemplo un automóvil o una computadora.

Y claro está, no es difícil imaginarse que los primeros “abrazan” a los segundos y los segundos a los terceros. Sin embargo para efectos de este artículo, me enfocaré en los segundos, es decir los Sistemas de Actividad Humana.
Teniendo lo anterior en mente, será posible entender, comprender y operar de una mejor forma el concepto de pensamiento sistémico. Y a pesar de que es obvio, si quiero subrayar el hecho de que para que exista el pensamiento sistémico, se requiere que exista al menos un Pensador Sistémico.
En este tipo de sistemas (SAH) al igual que en los sistemas inanimados, el desempeño del sistema siempre será inevitablemente un reflejo o proyección del diseñador, aunque a diferencia de los sistemas inanimados, en los Sistemas de Actividad Humana el o los diseñadores pueden estar concientes o no del sistema que han diseñado y bajo el cual operan.
De esta forma, sin importar si el sistema fue diseñado con un propósito claro en mente o no, la figura del pensador sistémico resulta relevante explorarla. ¿Qué rasgos tiene un pensador sistémico?, ¿Cómo puedo cultivar la habilidad de ser un pensador sistémico?
 
Desarrollo del tema.
Para responder las preguntas de la sección anterior me apoyaré en el libro titulado: La quinta disciplina en la práctica. (1994, pp. 102-113).
En este libro los autores describen a un pensador sistémico de la siguiente forma (negritas mías); “Un buen pensador sistémico, sobre todo en un ámbito empresarial es alguien que puede ver el funcionamiento simultáneo de cuatro niveles:

  1. Acontecimientos
  2. Pautas de Conducta
  3. Estructuras sistémicas
  4. Modelos mentales.

 
Cuando hablan de acontecimientos, se refieren a la recopilación de acontecimientos históricos relevantes que contribuyeron de una forma u otra a generar el nivel actual de desempeño del sistema. Es importante que sean frases breves que incluyan fecha en que sucedió tal acontecimiento y preferentemente que incluya datos.
Con frecuencia estos acontecimientos, quedan en el aire en una junta típica de trabajo en la que se busca encontrar solución a un determinado problema, y cada uno de los participantes pone “sobre la mesa” sus puntos de vista mezclados con narración de acontecimientos y datos dispersos. A continuación un ejemplo basado en una empresa real dedicada a la fumigación de casas habitación y negocios.
 
Primer nivel: Acontecimientos en fumigaciones ecológicas.

  1. En 2005 Manuel decide iniciar su propio negocio de fumigaciones, capitalizando sus estudios de ingeniería Química y meses de investigación para crear fórmulas ecológicas que sean menos agresivas con las personas y las plantas.
  2. En su mente, el ha pensado que puede ofrecer servicios diferenciados.
    1. Por ser fumigaciones ecológicas.
    2. Por brindar un servicio inmejorable con técnicos bien presentados, educados y capacitados ampliamente en el tema.
    3. Por vender –como opción- una póliza que a un precio 20% superior al que su competencia cobra por un servicio de fumigación, el ofrece fumigar el establecimiento o casa de su cliente 3 veces durante el año. Al final del cuál el cliente puede renovar su póliza por uno o varios años mas.
  3. En Enero de 2006, con la venta de uno de sus carros, parte de sus ahorros y usando su misma casa como bodega y oficina, adquiere el equipo básico y el mismo prepara las sustancias que darán el toque ecológico a sus servicios. Contrata a un ayudante y ambos se visten con un llamativo uniforme y empieza su labor de venta casa por casa, dejando volantes con la información de los servicios que ofrecen. En tanto su esposa toma las llamadas que de manera escasa empiezan a llegar a su teléfono particular.
  4. Junio 2006, los clientes se muestran sumamente satisfechos y complacidos con el servicio y calidad de las fumigaciones ecológicas y operan como la mejor fuerza de ventas al recomendar a los servicios de la empresa de Manuel a sus conocidos y familiares. Al cierre de Junio del 98, ya es preciso contratar un segundo ayudante, para poder atender al menos dos clientes simultáneamente. Su cartera de clientes es de 45, 20 de los cuales han comprado su póliza de servicio anual.
  5. Diciembre 2006, el negocio ha seguido creciendo, ya es Manuel y 4 ayudantes, su carro es insuficiente para desplazar a los fumigadores a los diversos domicilios y el equipo de fumigación apenas cabe, además de que es insuficiente. Su cartera de clientes ya es de 130 de los cuales 60 tienen contrato para la póliza anual.
  6. Abril 2007, Manuel y su esposa empiezan a tener fricciones, ya que el teléfono en su casa no cesa de sonar y desafortunadamente… son llamadas de clientes molestos.
    1. No se cumplió la primera cita a tiempo.
    2. El trato de los fumigadores no es el esperado.
    3. Los fumigadores no hacen bien su trabajo por la presión de ir a atender a otro nuevo cliente. Y mas importante aún…
    4. ¡No cumplen las visitas de los clientes que contrataron la póliza anual!

 
Segundo nivel: Pautas de Conducta
Finalmente la esposa de Manuel un buen día le dice: “Esto va de mal en peor, por más que te digo que mejores el servicio, parece que lo haces a propósito y todo sale mal, yo ya no voy a contestar el teléfono, a ver como te las arreglas, yo ya no quiero quedar con los clientes y ¡menos si son mis amigas!”
En este segundo nivel de actuación, los autores sugieren que se usen gráficas que ayuden a describir el comportamiento del negocio, a continuación muestro algunos ejemplos:

Cuando Manuel con ayuda de un amigo elaboraron las gráficas arriba mostradas, se dieron cuenta que la esposa de Manuel, tenía razón al manifestar que la situación se estaba saliendo de control. Todo parecía indicar que lejos de cuidar su base de clientes con póliza de servicio, habían enfocado los esfuerzos en seguir buscando clientes nuevos, lo cual complicaba la logística de los pocos recursos disponibles y empezó a afectar el servicio a sus clientes, en este caso, tanto a los nuevos como a los clientes de su base fija (pólizas), lo que provocó que perdieran clientes y ellos  a su vez lo compensaban buscando nuevos clientes y firmando mas contratos tipo póliza de servicio por un año.
La esposa de Manuel, solo “tocaba” el sistema vía contestar las llamadas telefónicas, no le fue muy difícil darse cuenta que el número iba en aumento pero principalmente debido a clientes que se quejaban continuamente o exigían la devolución inmediata de su dinero.
 
Tercer nivel: Estructura Sistémica.
El siguiente paso que hicieron Manuel y su amigo fue buscar relaciones lógicas de causa y efecto entre las gráficas que habían elaborado, y de esta forma llegaron al siguiente diagrama, que finalmente, no es otra cosa sino una hipótesis que pretende explicar el comportamiento de su negocio, subrayando que por lógica que parezca, no necesariamente es la única, ya que finalmente se está construyendo con las tendencias gráficas que fueron capaces de ver o de identificar.

Cuando Manuel repasó una y otra vez el ciclo arriba mostrado, pronto se dio cuenta que estaba metido hasta el cuello en un círculo vicioso, y que de seguir de esa forma pronto perdería a todos sus clientes y con ellos a su empresa, sin dejar de mencionar a su familia quienes ya estaban pagando los platos rotos de estas decisiones, y que afortunadamente fueron el foco rojo que le hizo detenerse un momento a pensar. Antes del ultimátum de su esposa su excusa favorita era: “no tengo tiempo, hay muchos clientes por atender”.
 
Cuarto nivel: Modelos Mentales.
El amigo de Manuel, quien lo apoyó en éste análisis le hizo ver que para salir del círculo vicioso era preciso cambiar el sistema de trabajo. Y para ello, le pidió a Manuel que le ayudará a descubrir los modelos mentales que estaban operando en el reforzamiento de éste círculo vicioso.

Después de haber analizado Manuel sus modelos mentales, descubrió que ¡él era la primera causa de que la empresa estuviera como estuviera! Acto seguido decidió hacer algo que hubiera sido inconcebible para él en los meses pasados: DETENER LOS ESFUERZOS DE VENTA A NUEVOS CLIENTES Y ENFOCARSE EN RECUPERAR LOS NIVELES DE ATENCIÓN, CALIDAD Y SERVICIO, Y EN ESPECIAL REALIZANDO UN SINNUMERO DE VISITAS PENDIENTES QUE TENIA PARA SUS CLIENTES CON PÓLIZA DE SERVICIO ANUAL.
Finalmente te invito a que pongas en práctica estos 4 niveles de pensamiento sistémico, los problemas ideales para analizar bajo este enfoque son aquellos que son recurrentes o persistentes.
Reproduzco a manera de cierre las palabras finales del Libro (les sugiero cambien en su mente la palabra “terapeuta” por “pensador sistémico”). El lenguaje del cambio. (Watzlawick, 1994, p. 141).
“¿Qué criterios debe seguir el terapeuta para elegir, de entre el número enormemente elevado de posibles y curiosas prescripciones, la que es indicada en cada caso? La respuesta es tan simple que casi peca de trivial y lleva en consecuencia, a un nuevo escepticismo: para elegir adecuadamente, el terapeuta debe analizar con cuidado lo que los afectados han venido haciendo hasta ahora para solucionar sus problemas… el terapeuta (debe) investigar la naturaleza y repercusión del aquí y el ahora, (para descubrir) que el verdadero problema es la solución hasta ahora intentada del “problema” y, en consecuencia dirigirá su intervención contra la solución intentada, que no hace sino mantener en vigor el problema. El problema es (en realidad) la solución y ésta es la que determina la naturaleza y la estructura de la intervención.”
En otras palabras, las soluciones que estamos consistentemente aplicando a un añejo problema, pueden ser la clave para encontrar al verdadero problema, ya que en realidad ha provocado que el sistema se auto-preserve, o sea…la misma solución que dábamos al problema, ¡Generaba más problemas!
Bibliografía:
Checkland Peter. System Thinking, Systems Practice. John Wiley and Sons 1981.
Senge Peter et. al. La quinta disciplina en la práctica: Estrategias y herramientas para construir la organización abierta al aprendizaje. Granica 1994.
Watzlawick Paul. El lenguaje del Cambio: Nueva técnica de comunicación terapéutica. Herder 1994.

La democracia a la mexicana

Transformación de Sociedades

El 23 de noviembre de 1983 Enrique Krauze escribió: Por una democracia sin adjetivos, pronto se cumplirán 35 años de este documento que recapitula la evolución de la democracia en México desde el golpe de estado de Porfirio Días en 1876 y cien años después que nuestro país -incluso- fue reconocido como “El milagro mexicano” por su desempeño económico
Hoy es claro que la democracia requiere de adjetivos, ya que es evidente que cada país la “cocina” de manera diferente, y con múltiples especias y aderezos
En la democracia a la mexicana, nos han invadido las frecuentes encuestas que ahora se generan como bolillos cada semana, y las revisamos por encima, sin reparar en lo que hay detrás de ellas.
Leamos la letra chiquita de cualquier encuesta y veremos que a lo mucho la muestra es de 1200 a 2500 personas, de un total de 88 millones de mexicanos con credencial de elector, esto es un 0.0028% de todos los electores. ¿Y con eso queremos pronosticar los resultados del 1o de julio?
En teoría la muestra debe ser aleatoria en todo el territorio mexicano, para que hubiera representatividad, lo que implicaría tomar muestras al azar de 50 a 80 mexicanos por estado, solo que por sentido práctico, la mayoría de las encuestas se hacen telefónicamente lo que descarta de entrada a las personas que no tienen teléfono, o los millones de personas que no contestan a teléfonos desconocidos por temor a ser extorsionados en el peor de los casos, o en el “mejor”de los casos a ser mareado por un vendedor telefónico.
Sin duda vivimos una tormenta perfecta generada a fuego lento, por una sucesión de gobiernos que si bien han logrado muchas cosas positivas, también han quedado a deber en temas claves para poder sustentar el paso de México hacia llegar ser un país desarrollado.
Los indecisos, los que no piensan votar, los que piensan anular su voto, quienes votan por primera vez, los de la tercera edad que han vivido lo que está en los libros como la historia de la democracia en México, y así le podemos seguir, identificando sub grupos que prácticamente tienen en sus manos el lograr -quizá con 30 o 35 millones de votos- definir quien será el siguiente presidente de México.
No olvidemos que Enrique Peña Nieto, “gano” la elección con tan solo 19 millones de votos de un total de 80 millones de posibles votantes esto es con un 23.7% de los electores, ¿por qué? Porque en el 2012 NO votaron el 37% de los posibles electores, esto es ¡29.6 millones de votos!
De 80 millones en números redondos: 20 votaron por Peña Nieto, 30 se abstuvieron de votar, y otros 30 votaron por otros candidatos, lo quiere decir que el 75% de los mexicanos NO aprobaron que Peña Nieto fuera presidente. Extraña democracia ¿o no?
Como un analista comentó recientemente: Las elecciones se ganan o se pierden el día de la elección.
Estamos a pocos días del 1º de julio, es el mejor momento para que en lugar de seguir mareados por tantas encuestas, nos enfoquemos en revisar con detenimiento las propuestas de los cuatro candidatos, y decidir de manera razonada nuestro voto, y dejar atrás la indecisión o abstención… que por cierto según la encuesta que veamos, pueden llegar a ser entre 20 y 30% del padrón electoral (88 millones de posibles electores en este 2018).
De nosotros depende el no volver a tener un presidente que sea elegido por una minoría de votos, digamos ¡NO!, al abstencionismo, y estemos listos para participar en esta jornada electoral histórica. ¡México cuenta con tu voto!
 

https://es.wikipedia.org/wiki/Elecciones_federales_en_México_de_2012

Administración de Tecnología/ Paella verde: ¿Desarrollo tecnológico?

Enrique Canales

Toda persona dedicada al desarrollo de ventajas competitivas tecnológicas debería aprender a cocinar novedades, para practicar el espíritu experimentador. La cocina es un laboratorio y cocinar es una manera muy concreta, además muy sabrosa, de resolver el problema de agregar valor de una forma creativa a lo que se hace de rutina

Enrique Canales 

En diciembre 20 de 1998, para celebrar un aniversario de mi jefa, hicimos una paella más o menos de la forma tradicional: aceite de oliva, ajo, cebolla, carnita de puerco, pollo, freír, chorizo, arroz, freír, caldo de pescado, carísimo azafrán, poco tomate, hervir, pulpo, camarones, salchichas, ejote chino, alcachofa, hervir, langostinos, almejas, sacar y evaporar. No por nada, quedaron riquísimas.
Pero, el día anterior al estar preparando los ingredientes; quitándole el hueso al pollito, achicando las costillitas de puerco, cociendo suave el chicloso pulpo y protegiendo los pistilos de azafrán, me brincó la posibilidad de hacer un experimento adicional ¿se podrá hacer una paella verde, en vez de una paella amarillenta de azafrán? Yo estoy en contra del concepto de “inspiración” como explicación de las ideas creativas que aparecen como si salieran de la nada. Todas las buenas ideas creativas, tienen antecedentes de meses y años atrás, lo que pasa es que no reflexionamos sobre estos antecedentes. Decir ” tuviste una buena idea porque te cayó la inspiración”, me parece una falsa explicación.
Bueno, antecedentes. Mi hermano Roberto nos había invitado el 8 de julio a cenar a su casa. Nos puso un platón ovalado, para pasar a servirnos. En dicho platón había un anillo exterior de frijoles negros en su jugo, luego hacia adentro una rosca de arroz blanco y en mero enmedio un nido de camarones en salsa verde de fresadilla. La combinación de frijoles, arroz blanco, camarones y salsa de fresadilla resultó muy afortunada.
Como en octubre de ese año, mi señora hizo un caldo de exclusivo cilantro. Verde intenso, sabor a pura frescura. Verde que te quiero verde. Semanas después, mi señora preparó una calabacita con pollo, con tantito tomate de fresadilla. Luego, en otro día preparó unas costillitas de puerco en salsa verde.
En diciembre 19, al estar preparando los ingredientes de la paella a la española y al estar, como regiomontano, pensando en lo carísimo del azafrán rojo-amarillo, me pregunté ¿cómo quedaría una paella verde cocida a base de jugo de cilantro y algo de tomate de fresadilla? Y decidí hacer un experimento lateral, una paellita experimental y hacerla al mismo tiempo.
Total, todo lo hice igual, pero despuecito de dorar el arroz en el aceite, en ese momento, le agregue el caldo intenso de cilantro y la mitad de tomate de fresadilla, guardando la proporción de dos tazas de líquido por taza de arroz. Todo lo demás lo hice igual, salvo que no le agregué ni el azafrán ni el poco tomate rojo.
Y dejé que aflorara el arroz.
La Paella Verde, quedó incitante, cachonda y energizante. En cambio la versión de la también rica paella valenciana se veía pálida, amarillenta, reposada.
Yo no digo que inventé la paella verde, yo solamente digo que se me ocurrió hacer una paella verde y que quedó muy sabrosa y que a los que les he platicado les parece simple y novedosa.
El punto es, ¿es esto un desarrollo tecnológico o es una puntada ocurrente? Veamos. En primer lugar, la industria de los alimentos es una industria enorme, que brinda miles de oportunidades para los que quieran trabajar en ella.
Hay grandes grupos industriales, agrícolas, comerciales, millones de tiendas y restaurantes, en fin, el mundo es inagotable. Hay cientos de formas como se puede preparar el trigo, el maíz, el arroz, en fin, los ingredientes que pesques, son finitos como ingredientes pero infinitos en su expresión, azúcar, chocolate, bebidas, huevos, leche, total inagotables minas de exploración.
Pero ¿que diferencia existe entre una ocurrencia casera a un desarrollo tecnológico? Bueno, para empezar hay una intención diferente. El desarrollo tecnológico requiere la motivación de la conquista de un mercado, no se trata de hacer algo bueno y aceptable, se trata de ganarle a todos los posibles competidores.
Luego, el desarrollo tecnológico, requiere hacer las excursiones hacia las fronteras del conocimiento de una manera formal. Yo no averigüé nada. No vi ningún trabajo científico. Ni siquiera un artículo. Sin embargo, debería de haber consultado todo lo más posible con referencia a las paellas, a los rissotos, a las mariscadas con arroz, en fin; todo el nivel profesional y luego el nivel científico.
Podría haberme metido a Internet, adquirir libros, conocer de cocineros famosos, recorrer las veredas ya conocidas.
Luego debería haber hecho un mapa, de lo que sabemos los humanos sobre las paellas verdes y exactamente mapear, todos los frentes del conocimiento, digamos todas las rutas que todavía no hemos recorrido. Ojo, aquí hablo en términos físicos, químicos, biológicos.
¿Qué es lo que no sabemos todavía? Y por otro lado, comenzar a ver y estudiar el gusto de las gentes, mi mercado objetivo. ¿Qué tanto cilantro? ¿Qué tanta acidez de los tomates de fresadilla? ¿Y el color resultante, verde alfalfa? ¿Camarón mediano o grande? ¿Pulpo blanco, de qué tamaño se prefiere, por qué? Luego, vería la manera de enlazar lo posible con lo deseable: ¿cuál proceso? ¿de qué tamaño las paellas? ¿les gustaría que fueran congelables? ¿servicio a domicilio? ¿Paellas negras a la tinta del pulpo? ¿Paellas rojas al pimiento? ¿Nos conviene hacer sistemas expertos y meter todo a algoritmos computarizables? ¿Habrá oportunidad de organizar un gran sistema de franquicias con 60 puntos de preparación parcial en México y unos 300 en Estados Unidos? ¿Y en España, Venezuela, Brasil con aceite dendé? Bueno, por lo pronto, el siguiente sábado me hago mi paella verde, por tercera vez, pues quiero provocar envidia, pero no considero que inventé nada ni que hice ningún desarrollo tecnológico. Vale.

Contratar Cárceles

Enrique Canales

Escrito en Reforma el Jueves 25 de Enero del 2007
Autor: Dr. Enrique Canales
Felicito a Felipe Calderón por su brava decisión de extraditar a Estados Unidos a un grupo de peligrosos narcos para que sean juzgados y muy probablemente sentenciados a muchos años en prisiones más protegidas. Los gringos, por viciosos, han hecho muy poderosos a estos narcos, por lo tanto, que ellos mismos se encarguen de enjuiciarlos, encerrarlos y cuidarlos, lo cual les va a costar muy caro.
El Estado mexicano cumple y sigue con la responsabilidad de mantener a estos criminales alejados de la sociedad mexicana. Este acto no demuestra nuestra debilidad, ya que nuestra debilidad estaba detectada y demostrada desde mucho antes. Este acto es congruente con nuestra debilidad como carceleros. Al Congreso le toca recoger el paliacate arrojado y modificar las leyes obsoletas a las que se refirió Felipe. ¿Tenemos claro cuáles son las leyes obsoletas y cómo las vamos a modificar? ¿Ya nos pusimos de acuerdo?
Muchos piensan que el Estado es un ente que tiene personalidad de rey humanoide y por eso se utiliza la metáfora de considerar al Estado como un gran protector, quien puede hacerse cargo de todo lo que le indica la Constitución: educación, salud, vivienda, justicia, seguridad, igualdad, combate a la pobreza, e inclusive, el Estado debe tener capacidad de encerrar a presos de máxima agresividad.
Pero no seamos ilusos, el Estado tiene el tamaño de los recursos y de las capacidades de las personas que realizan las funciones del Estado. La cara visible y tangible del Estado es el burócrata en la ventanilla atendiendo una queja, es el policía federal que nos detiene en la carretera, es el guardia de una prisión, es el profesor de primaria, es el inspector de obras, es también la Profeco que se deja vacilar por las gasolineras y se vuelve cómplice del fraude masivo.
Es claro que el Estado mexicano debería tener el poder de encarcelar evitando nuestros vicios carcelarios; privilegios, corrupciones, venta de droga y alcohol, trata de blancas y morenas, facilidades para seguir llevando a cabo los negocios de droga, secuestros, asesinatos y demás. Pero 76 años de corrupción generalizada no se limpian en dos o tres sexenios.
Las funciones de nuestro Estado están afectadas por la fuerza de muchos líderes sindicales que trabajan, pero que a veces también medran restando libertad a los gobiernos electos; digo, libertad de realizar dichas funciones como podrían y sabrían hacerlo. Por eso, nuestro Estado no pudo ser industrial como lo quería esa izquierda nacionalista encabezada por Echeverría, ni ha podido ser buen petrolero ni tampoco educador competitivo, menos ha podido ser buen carcelero.
De hecho Estados Unidos, al comprender que su propia burocracia le impedía llevar a nivel de excelencia la función de encarcelar, ha venido contratando el trabajo de diseñar y construir cárceles y además mantener en prisión a sus criminales. Ahora existen allá varias empresas privadas que concursan el servicio de encarcelar, bajo especificaciones bien duras y muy vigiladas. No se privatiza el Estado ni se privatizan los gobiernos; se contrata la tarea material y administrativa de llevar a cabo la función de encarcelar.
Contratando en concursos abiertos y aprendiendo a vigilar a los contratistas, el Estado no se quita ninguna responsabilidad; cumple mejor su función al aprender a contratar el servicio de mantener las cárceles bien controladas. Es más, esto aumenta la productividad y competitividad porque se aplica el principio de subsidiariedad.
Pero si en Estados Unidos existen compañías que ya saben diseñar cárceles, administrar prisiones y cuidar presos, ¿por qué no contratamos a varias de esas empresas para que nos coticen en concursos abiertos y que los ganadores nos modernicen y nos cuiden dos o tres cárceles federales del país? Así nosotros aprenderemos y de seguro mejoraremos lo que los gringos saben de encarcelar bien.
Me dirán que es inmoral lucrar por mantener encarcelados a unos criminales y que la iniciativa privada nacional o extranjera no debe meterse a ese negocio. ¿Por qué no?
Primero, lucrar no es malo; al contrario, demuestra que se ha dado un mejor servicio a costo más bajo; por lo tanto, lucrar en un país abierto y transparente es la demostración de la capacidad de servir en forma competitiva. Segundo, el trabajo de cuidar, alimentar y hospedar a presos, es un trabajo profesional con riesgos como hay muchos trabajos. Tercero, el Estado sigue siendo responsable de encarcelar, pero ahora sabe cómo hacerlo mejor.
 

Entrevista al Dr. Enrique Canales

Enrique Canales

Entrevista con Enrique Canales Santos, pintor mexicano nacido en Monterrey, Nuevo León el 27 de octubre de 1936 y fallecido el 19 de junio de 2007.
Por: México Desconocido
¿Desde cuando te acuerdas de tu relación con el demonio y la pintura?
Nací en una de las casa de sillar ocre paja en el centro de Monterrey, ahora nueva Macroplaza. Al demonio lo reconocí como caluroso, fue el que me incitaba a comerme las esquinas de las paredes de sillar que cundo húmedo sabía a fresca tierra dulce. Yo siempre me imaginé que cerca de nosotros traíamos a un ángel de la guarda discutiendo con un
demonio tentador. El demonio hacía que sin ton ni son rayara con crayola las paredes, hasta que el gran jefe “Cejas”, mi padre, hombre oso moreno, tapió los sillares con mosaicos de colores arabescos.
Tus cuadros son muy cargados de materiales ¿a qué se debe?
Siempre viví pegado al suelo y me intrigaba la gran variedad de colores y texturas: recogiendo nueces en Bustamante sobre olorosa tierra negra amoratada, y anacuhuitas en Agualeguas sobre ocres almendrillas; atravesando el río Santa Catarina con sus infinitas piedras bolas azules; buscando cuadritos de cuarzo como queso en el Obispado. Consideraba joyas los colorines caídos en las Mitras, pepenaba monedas de a cinco sobre las mil texturas de las banquetas. Todo lo palpaba con manos y ojos.
¿Pero de dónde viene lo orgánico de tus temas?
Cada animalito traía sus texturas y sus colores: catarinas en los geranios, lagartijas en La Huasteca, caramuelas en el tras patio, el impactante ciempiés azuloso de cuerpo con sus patas amarillas, el gusano quemador con sus negros y oros refulgentes. De cada animalito me imaginaba la forma de sus ángeles y la forma de sus demonios. Las alas de las moscas me parecían alas de ángeles o demonios chiquitos. Desde luego el color de la sangre fresca corriendo sobre la obscura sangre seca, es un espectáculo de colores orgánicos.
¿Alguien de tu familia fue pintor o artista?
No que yo sepa. No tuve que seguir los pasos de nadie. Creo que sentí la primera tentación de la libertad individual como a los doce años, cuan- do papá me dijo que los Canales no habíamos venido de ningún lado. No somos ni indios completos ni españoles, de hecho en mi familia unos somos blanquitos y otros morenitos. Papá me dijo que los Canales habíamos brotado del desierto de Agualeguas y que no teníamos ningún compromiso con nada ni con nadie. Nosotros deberíamos buscar nuestro propio quehacer. Papá me enseñó, o aprendes a usarte o te van a usar. No había de otra, o le hacemos caso a nuestro propio ángel o le hacemos caso a nuestro propio demonio.
¿Cuándo empezaste a dibujar o a pintar?
A los trece años tomé mis primeras clases de dibujo en una casa particular e hice una cabeza de caballo preciosa semicopiada de algún pintor europeo. A todo mundo le gustó. Me asusté cuando a varias tías mías les encantó el caballo mentado; yo no quería llegar a ser un agradador de tías. Tuve que rodear por veinte años a toda la pintura “bella” y buscarme mi libertad.
¿Y tus estudios de ingeniería y de doctorado?
La ingeniería mecánica la gocé por constructiva, ingeniosa, exacta, útil. Verdaderas esculturas en movimiento. La gerencia de empresas pronto me fastidió, se te pide mucha astucia; casi no se te pide inteligencia, y cuando quieres sugerir sabidurías se te enojan y te dejan en Babia. Tanta astucia te convierte en animalezco: coyote, rata, gallo, águila, gato, sobre todo gato. Mi doctorado en innovación en la Universidad de Houston me quitó las ganas de buscar la inspiración; también me quitó el miedo a los falsos demonios y dejé de rezarle a los falsos ángeles. Me interesaba entenderle a la ciencia y a la tecnología, pues contienen venenos y tesoros. Ahora, bien ilustrado, sin miedos, sólo cultivo demonios y ángeles verdaderamente míos, de mi establo, de mi catedral, de mi paisaje.
¿Has vivido fuera del país?
Casi dos años en Brasil; mi ángel y mi demonio despertamos de un largo sueño mexicano en Brasil. Los viajes a Europa y a los Estados Unidos te hacen más mexicano por lo fuerte del contraste, te obligan a replegarte en ti mismo, pero Brasil te modifica lo mexicano, pues te afirma en tus valores humanos y además te quita lo dogmático y matachín que tenemos los mexicanos. En Brasil hasta a Alfonso Reyes se le quitó lo azteca que pescó en el D.F. En Río te armas caballero a base de sabores y olores. Los ángeles y los demonios brasileños que a ratos se revolvían entre sí, traían los colores de las escuelas de samba, y te sugerían otras ventanas a la vida.
¿Te sientes avanzar en pintura?
Más que avanzar, yo creo que te resumes a más y más profundidad. Cuando me atreví a llevar un diario de mi excursión pictórica, sentí que las palabras ayudan a concretar sobre el contenido elusivo de mi pintura. Toda buena pintura exterior es el resultado de una buena lucha interior. Toda superficie tiene color, textura y forma. Toda superficie externa delata las fuerzas del bien y del mal moviéndose en su interior. El demonio es resbaloso, se te escapa cuando ataca; a veces el demonio es el caos, a veces el orden aburrido, a veces la prudencia maligna. En la pintura el ángel re- presenta el atrevimiento, la innovación, el valor de plasmar nuestro espíritu en la materia. En la pintura no avanzas, abarcas.
¿Cuál es la guía de tu pintura?
La guía es la emoción interna de verte reflejado en una parte del material externo. Yo no puedo ver cuadros enteros, así como tampoco veo personas enteras. Son los elementos que agitan más energía los que me llaman la atención. Así, de repente encuentro pedazos de cuadros míos o ajenos que contienen vetas de mi verdad.
¿La pintura es racional?
Pintas con todo; con tu razón, con tu emoción y con tu cuerpo. Ponerse a pintar no es ponerse a argumentar, ni a racionalizar; al contrario, ponerse a pintar es todo un ritual. Para ello necesitas cierta paz interior, cierta armonía fundamental; necesitas espacio, silencio o ruidos controlados, materiales, tiempo y disposición de ánimo.
¿Tu pintura es más bien optimista? ¿tú eres optimista?
Yo nunca pinto con mala vibra; cultivo con esmero mi delicado optimismo y si no traigo, si no puedo contentarme conmigo y con la vida, mejor esa tarde no pinto, camino por la montaña o simplemente limpio pinceles, arreglo papeles, hasta que se me pase la mala onda. Quiero plasmar tan sólo mi entusiasmo, al dios interior que todos traemos adentro, al dueño de mis ángeles y de mis demonios. Cantar es más difícil que llorar, al menos para mí, lo considero más importante pues tenemos que animamos los unos a los otros.
¿Pintas para vivir o vives para pintar?
La vida aunque dure poco es inmensa, está llena de misterios; lógicamente es más grande que el arte y el arte es más grande que cualquier país.
Dicen que tu pintura es muy mexicana ¿es cierto?
Soy mexicano por ombligo y me da mucho gusto y no necesito esforzarme por serlo -se es más mexicano cuando haces lo que te provoca, cuando haces lo que eres y te arrojas con plena confianza a plasmarte en tus quehaceres.
¿Cuál ha sido tu relación con galerías y museos?
A partir de 1981 Arte Actual Mexicano de Monterrey me apoyó, luego el Museo de Monterrey, Galería de Arte Mexicano, Museo Tamayo, Bellas Artes, Museo Chapultepec, Museo de José Luis Cuevas; Galería Quetzalli en Oaxaca, Marco de Monterrey y finalmente el Museo Amparo de Puebla, que ha adquirido una buena colección de mis obras. He expuesto en París, Bogotá y en varias ciudades.. Tengo buena y mala crítica; estoy en plena lucha. Pero mi única preocupación es mi siguiente cuadro.
¿Qién eres, qué eres?
Yo no sé qué soy, ni quién soy, pero sé que soy lo que hago, por lo tanto soy pintor de cuadros, labrador de piedras, amaso arcilla, pulo vidrio, pienso sonseras a todo color. Además, cuando me canso de estar parado, me gusta sentarme a escribir sobre pintura, tecnología y temas políticos. Pero lo que más me gusta son las hembras con el cabello un poco enmarañado.

A mover normas

Enrique Canales

Mucha gente cree que si opera su empre­sa o su función a un nivel profesional, como “debe de ser”, ya con eso va a poder competir como si fuera una empresa “de clase mundial”. Esa creencia es una vaci­lada.
El concepto de “nivel profesional”, el concepto de operar como “deber ser”, el concepto de operar a nivel de “clase mun­dial” e inclusive el concepto de operar “en el nivel del benchmark”, son concep­tos viciados desde su mera concepción. Todos esos conceptos significan en rea­lidad, lograr operar “al mero centavo”, como “un relojito”, de acuerdo con las últimas novedades de la industria o de la profesión.
Sin embargo, todas esas maneras de describir las operaciones de una función o de la empresa implican la comparación contra un buen estándar considerado desde el exterior. Los que ponen las normas y estándares son normalmente los principales competidores internacio­nales, los proveedores de equipo y mate­rias primas, los principales clientes, las asociaciones profesionales e inclusive a veces por algunos gurúes.
La norma ya sea legal o simplemente profesional, marca el nivel de calidad requerido desde el exterior, sin embargo, por necesidad interior, las ventajas com­petitivas requieren operar a niveles más superiores todavía.
Otra de las expresiones que también se usan para describir este estado muy profesional de operar, es decir: “nosotros cumplimos perfectamente con las nor­mas establecidas por la x, y o z, asocia­ción internacional”. Así, se piensa que si uno cumple perfectamente con las nor­mas, significa que uno es muy competiti­vo. Pues no. Cumplir con las normas te hace competente de forma estándar y normal, es decir ordinario.
Si estás dentro de las normas, te encuentras en orden. Felicidades pero los competidores internacionales se salen del orden, son extraordinarios, se brin­can las normas en el sentido positivo y agresivo. Las ventajas competitivas se encuentran por encima de la norma, arri­ba de las trancas, del otro lado “del deber ser”.
Conste, estamos dentro de las ven­tajas competitivas de carácter tecnológi­co, es decir dentro de las ventajas que obtienes porque sabes hacer algo que todavía los competidores internacionales no saben hacer, porque no saben alguna cosa que algunas de tus gentes o tú mismo, sí saben hacer porque lo han pro­bado o porque lo han calculado y demos­trado.
Entonces, si tú cumples con las nor­mas establecidas, eso quiere decir que apenas sabes lo que las autoridades lega­les o profesionales exigen que se sepa y que se haga. Cumplir con las normas garantiza que los clientes reciban simple­mente “lo que debe ser”. Las normas se establecen para que los profesionistas y los empresarios no engañen ni pongan en riesgo a los consumidores, pero las normas no se hicieron para que alguien se hiciera más competitivo.
Por eso, cumplir con las normas y haciendo lo que se debe hacer, no te da ninguna ventaja competitiva, a menos que compitas con otros “anacuas”. Ojo, si cumples con las normas y eso te hace competitivo en el mercado quiere decir que estás compitiendo con gente poco profesional. Bueno, ya es tiempo que empieces a competir con los meros cam­peones, para que ganes más dinero y puedas exigir que te paguen más dinero y dejes de pagar mano de obra barata para compensar tu falta de competitividad.
De ahí, que necesitas aprender a hacer lo mismo que haces pero ahora de forma que lo hagas mucho mejor que la norma. La norma es la plataforma, es la cancha desde donde empiezas a competir un poco más en serio.
Ya no se trata de que hagas mejor las cosas, pues haciendo mejor las cosas puedes quebrar en pocos años. Casi todas las empresas y personas que fallan, han estado haciendo mejor las cosas, pero no se han dado cuenta que los competidores han mejorado con el acelerador pegado por 10 ó 15 años y de repente con tantita ciencia de pellizco, han rebasado todos los atributos y todos los costos de lo que se hace. Los mejores competidores de cada ramo empujando a la ciencia, aceleran el desarrollo de sus productos, servicios, sistemas administrativos, pro­cesos y acopio de materias primas.
Las normas a veces son trancas que los competidores más agresivos han con­figurado encandilando a las autoridades para quitarse a competidores chambo­nes que abusando de la mano de obra barata, abusando de la mala calidad, abusando de la contaminación ecológica, tratan de competir por el lado de la cune­ta, por fuera de la cancha oficial. Toda norma es una herramienta competitiva que si te pega para eso la propusieron tus competidores internacionales.
Pero tú también puedes entrarle a competir en serio. Tú también puedes desarrollar tus ventajas competitivas, tú también puedes primero cumplir las nor­mas y luego escoger dos o tres normas, para rebasarlas con un poquito de desa­rrollo tecnológico, tú también puedes exi­gir cambiar alguna norma a tu favor.

Mandar hacer tantita ciencia

Enrique Canales

Administración de la Tecnología
Publicado en Reforma el 25 de julio de 2005
Autor: Enrique Canales Interfase
Conviene contratar tantita ciencia, sólo lo suficiente para contestar formalmente dentro de cuáles parámetros podemos trabajar.
Unproyecto de nivel profesional dentro de una empresa procura hacer algo de mayor valor a menor costo. Por eso, un buen profesionista debe encontrar oportunidades de subir valor, es decir, lograr que nuestros productos y servicios les sean más útiles a los clientes y consumidores. También el buen profesionista sabe encontrar oportunidades de bajar costo sin perjudicar el valor.
Bajar costo de forma despiadada, perjudicando el valor y la calidad de nuestros productos y servicios, es caer en el resbaladero de nuestra desgracia. Pronto vamos andar diciendo que nuestro producto es muy bueno y muy barato, lo cual es charlatanería.
Con conocimientos meramente profesionales, conseguibles en la Red, en los libros de textos o con los proveedores, no podemos tener ninguna ventaja prolongada, pues todo mundo nos puede copiar.
Entonces, cuando queremos competir con un saber hacer algo que todavía nuestros competidores no saben cómo hacer, estamos hablando de la necesidad de realizar un desarrollo tecnológico. Necesitamos aplicar otros conocimientos y otra lógica a la técnica, lo cual implica hacer algo muy específico y diferente a nivel competitivo mundial.
¿Es muy difícil hacer desarrollos tecnológicos en las empresas mexicanas? Se requiere
que los patrones lo anhelen y se requiere que algunas personas dentro de las empresas también traigan ganas de estudiar algo a profundidad. Al principio de un desarrollo tecnológico se sufre un poco porque no sabe por dónde empezar, pero con buena ayuda técnica y tal vez algo de ayuda económica de Conacyt, cada vez existen más empresas realizando algunos desarrollos tecnológicos de ventaja.
Desde luego, también existen más consultores que dominan el área de administración de tecnología y pueden mapear avances de mercado, de competidores, de tecnología y de la frontera de la ciencia. Así también cada vez existen más profesores universitarios que, aunados a sus temas de interés científico, ya aprendieron a dar consultorías en pequeñas intervenciones, porque ya se han dignado a meterse algunas tardes a las empresas para entender su problemática.
Gracias a la apertura, la necesidad de competir con conocimientos de frontera se acelera, pero todavía dentro de nuestras universidades, incluyendo desde luego a la UNAM, al Poli y a la UAM, existe muy poca disposición para que los científicos se involucren personalmente en ayudar con tantita ciencia de punta a nuestros empresarios que buscan pequeñas pero significativas ventajas para sus productos y procesos.
Nuestros empresarios mexicanos no tienen por qué esperar a que se desarrolle ninguna ciencia básica, ni menos tienen que utilizar a la ciencia mexicana, al contrario, una característica de la ciencia es que es universal. Si un profesor investigador consultor de la Universidad de Wisconsin o de Sao Paolo se encuentra en la frontera de la ciencia de materiales cerámicos para uso electrónico, y ése es el tema afín a los productos de la empresa, pues nos conviene preguntarle por correo a dicho profesor.
Para grandes proyectos conviene hablarle al departamento de vinculación, pero para contratar tantita ciencia, es mejor ponerle un correo directamente al profesor y con él nos entenderemos muy fácil. La mayoría de los profesores investigadores de otros países comprenden que una parte de la ciencia de frontera está disponible para experimentar en ciertas aplicaciones.
A veces ni el empresario ni el operador dentro de la empresa pueden plantear su problema productivo en términos de problemas tipificados como de ciencia y
tecnología, pero no importa por el momento, porque siempre hay profesores investigadores y consultores que se bajan de sus nubes para atender problemas reales en las canchas empresariales, empezando por transformar un problema industrial o de servicio, en un problema científico específico y de poca duración.
El administrador de un desarrollo tecnológico se topa con lo que no sabe, por lo tanto, invita a uno o varios profesores investigadores a realizar tantita ciencia, para dejar bien establecido lo que se puede o no se puede hacer. Conviene contratar tantita ciencia, sólo lo suficiente para contestar formalmente dentro de cuáles parámetros podemos trabajar.
Los empresarios mexicanos cuentan con muy pocos socios científicos universitarios que en forma personal estén dispuestos a bajarse de los altos estudios para trabajar en pequeños problemas puntuales, creando puntas de flechas competitivas de nivel internacional. Desde luego, el socio científico si es certero y efectivo podría de pasada ganar algo de dinero como consultor, dinero que puede emplear para volverse más fregón.

La Ley de la Igualdad

Enrique Canales

Articulo publicado en el periódico EL NORTE el 22 Nov de 1993
Autor: Dr. Enrique Canales

Para hacer las cosas, tu puedes andar en tono pre-profesional empírico informal; también puedes andar en tono profesional, esto es, al día en tus conocimientos, haciendo las cosas bien.

Desde luego, también puedes andar en tono de la administración de la tecnología tratando formalmente de darle en la torre al competidor haciendo cada cosa que haces mejor que como él la hace.

La ley de la igualdad establece un hecho terrible

En la lucha por la ventaja tecnológica de saber hacer algo que no sabe hacer todavía tu competidor, si tu sabes hacer las cosas igual que tu competidor, el dinero que ganas cada vez va a ser menos.

La ley de la igualdad establece que si haces las cosas igual o peor que tu competidor, poco a poco te vas a ir achicando el margen de contribución y a tu competidor también.

Si quisiéramos expresar la ley de la igualdad con toda su rudeza, tendríamos que decir que «la igualdad produce pobreza».

Insisto; si yo se hacer las cosas igual que mi competidor, no voy a poder cobrar más que él, ni él va a poder cobrar más que yo, y al ratito el mercado se va a encargar de irnos presionando a no poder subir los precios, y nuestros costos crecientes nos van a erosionar el margen de utilidad.


La igualdad, pues, produce pobreza

Esta ley choca, por que nosotros, al ser cristianos y demócratas, siempre hemos considerado un valor humano el establecer y procurar la igualdad entre la sociedad. Sin embargo, en el mundo competitivo, la sociedad maltrata a los iguales y los obliga a dejar de ganar centavos.
Claro, el negocio todavía puede ganar dinero, por tener otros tipos de ventajas que no son tecnológicas, como por ejemplo ventajas geográficas, ventajas por concesiones, ventajas por volumen y ventajas por vivir en un país organizado para competir.

Pero en cuanto a la ventaja tecnológica, que consiste en saber hacer y hacer algo que el competidor todavía no sabe hacer, si lo que sabemos hacer también lo sabe hacer el competidor, pues no tenemos ventajas y no podemos ganarnos el pan.

La ley de la igualdad que pronostica pobreza para los que saben hacer lo mismo, se vuelve dramática por que atenta contra nuestras queridas concepciones del quehacer empresarial.
Por ejemplo, muchos profesionistas piensan que si son muy buenos, que si se mantienen al día en su profesión, que si hacen las cosas bien, pues les tiene que ir bien a chaleco.

Pues la ley de la igualdad dice, por el contrario, que si tu haces las cosas bien y sigues haciendo las cosas como se deben hacer de acuerdo con el deber ser profesional, no se te garantiza que te va a ir bien.

Si haces las cosas las hace bien a la primera vez, y las sigues haciendo bien, de todas maneras te puede ir muy mal, debido a la ley de la igualdad.

Si un ingeniero mecánico es muy bueno en su profesión, va a hacer las cosas como se establece en la buena práctica de la ingeniería mecánica. ¿A poco tiene garantía de que le va a ir bien? Pues claro que no. ¿Por que?

Pues porque abundan ya los buenos ingenieros mecánicos en el mundo. Cualquier egipcio, filipino, coreano, brasileño, angolés, argelino, es buen ingeniero mecánico.

Y precisamente por ser buenos ingenieros mecánicos caen todos ellos en la ley de la igualdad. Todos ellos aprendieron a hacer las cosas más o menos bien, de acuerdo a los buenos libros de ingeniería mecánica.

La ley de la igualdad nos dice que en un mundo competitivo ya no es suficiente ser un buen profesionista, por que si tan solo como eso, vamos a caer en la ley de la igualdad y cada vez vamos a ganar realmente menos, cada vez menos.

Lo que nos lleva a reflexionar de que para poder ganar alguna plata brillante, necesitamos tener alguna ventaja sobre el competidor y que el cliente vea y aprecie esa ventaja.

Pero no nos referimos a los conocimientos profesionales, ni proveedores, ni equipos modernos, ni computadoras por que fácilmente lo puede obtener el competidor.

Si tu haces algo con la ayuda de un proveedor, ten la seguridad de que al rato tu competidor lo va a saber.

Si tu haces algo con la ayuda de algún equipo moderno que compraste en Milán, ten la seguridad de que al rato tu competidor lo va a saber.

La ley de la igualdad te va a pescar haciendo las cosas igual o peor que tu competidor y te va a cortar tu margen y te vas a morir desangrado por haber vivido igual.

La administración de tecnología trata pues de encontrar la racionalidad de buscar y lograr desarrollar ventajas competitivas a base de saber hacer muchas cosas que tu competidor no sabe hacer.

Pero para ello vas a necesitar conocimientos más filosos, mucho más desiguales, más diferenciados, más desmarcados, más profundos que los que te da tu querida profesión.

En el mundo de la lucha competitiva, a los iguales, aunque sean profesionales, no los protege nadie.